¿Eres de los que pone metas nuevas cada año? ¿Te gusta empezar con la energía de los propósitos y la esperanza de tener un año mejor que el anterior?
No estás solo. Mucho del éxito de los festejos del cambio de año vienen de la emoción de que las cosas resultarán mejor a pesar de que lo único que cambia es un número en el calendario (aunque es también el corte del año fiscal). Los pedidos, el horario laboral, las facturas, la operación diaria, los documentos por realizar o los libros por leer y la rutina de casa, continúan. Hay para quienes el trabajo aumenta y para quienes se relaja. Al igual que en el verano, en primavera o incluso en otoño. Solamente se trata de un ciclo más.
Sin embargo, sí es una buena oportunidad para revisar los resultados del año pasado y con base en eso ser realistas para tomar las decisiones del rumbo o metas a realizar en adelante. Sea esto personalmente, para la empresa o el equipo que diriges.
Lo más importante es que los datos que tomes para evaluar sean REALES y no caer en ponerse metas que siempre serán alcanzables, modificar datos o excluir información para quedar dentro de meta. Con esto, lo único que se logra es engañarse a sí mismos y a la empresa para “quedar bien”. Es el mismo principio de ignorar donde fallamos o siempre querer aparentar perfección. Esto NO permite la mejora continua, ni en la empresa, ni en lo personal. Los sistemas de gestión que realmente funcionan son un reflejo de la realidad, no un adorno para poner en los reportes. Son una herramienta para lograr continuidad en el negocio, crecer y llegar a metas reales. Ser sinceros, honestos, abiertos y tener algo de humildad para reconocer dónde estamos es la sustancia con la cual se puede moldear una cultura de calidad, con la cual se pueden tomar las oportunidades de crecimiento desde la realidad y ésta es la mejor opción para un punto de partida con mayores probabilidades de alcanzar el éxito.
Así como el ejercicio de nuestro cuerpo va mejorando nuestra salud, la práctica de la mejora continua nos va llevando a un camino que nos acerca más al éxito, al cambio que se refleja en crecimiento o evolución hacia algo mejor. Deseo este año, así sea también para ti.
Con cariño,
Zaida Paredes
Are you the kind of person that sets new goals each year? Do you like to start with the energy of purpose-setting and the hope of experimenting a better year than the last one?
You are not alone. Much of the success of all the partying with the new year come from the emotions about things getting better even though the only thing that changes is the number on the calendar (although it is fair to say that it is the end of the tax year). Work orders, office days, invoices, daily operation, documents to write or books to read and home routine go on. For some, workload becomes heavier than for others. And as well as summer, spring or even autumn and winter, it is just another cycle.
It is a great opportunity to review last year’s results and use them to make decisions on the course to take or the goals to set for the year ahead. Be it for your personal life, the company, or the team you’re leading.
What’s most important is that the data that you use to evaluate results from previous year is REAL and don’t fall into the trap of setting very easy goals, modify data, or exclude information to force being within the goal that was set. This is a way of fooling ourselves or the company so that we can “make a good impression”. It’s the same principle of ignoring where we fail or always pretending perfection. This DOES NOT allow continuous improvement, neither on business nor personal life. Management systems that really work represent reality, they are not made-up reports or records. They are a tool to assure business’ continuity, grow and reach real goals. To be sincere, honest, and open, as well as to have some humility to recognize where we are is the substance with which you can mold the company’s (quality) culture with which growth opportunities can be taken and that’s the best option as a starting point with greater chances to achieve success.
Just as physical exercise of our body causes to improve our health, continuous improvement will lead us to a road closer to success, to the change that turns into growth or evolution towards something better. I wish that this year is like that for you too.
Wishing you the best,
Zaida Paredes